NaNoWriMo 2016: el fracaso.

¡Hola a todos! Ante todo, mis disculpas por haber tardado tanto tiempo en aparecer por aquí. He tenido la suerte de empezar un Erasmus en Inglaterra y estos primeros meses han sido de locos. A penas he tenido ideas sobre qué escribir y cuando tenía alguna buena, no encontraba las ganas. Pero supongo que a veces todos necesitamos un respiro, ¿no?

Hoy vengo a contaros un poco mi vida y a hablar de una cosa en la que he estado metido este año como lo estuve el pasado: el Nanowrimo. Si todavía no sabes lo que es el Nanowrimo, échale un ojo a esta entrada. El año pasado fue genial, aunque tuve mis altibajos logré superarlos sin problemas y al final acabé ganando el reto con una novela terminada bajo el brazo. ¿Pero este? Ay, este año es bien distinto.


Sabía desde el principio que este Nanowrimo iba a estar complicado porque a principio de Noviembre tenía que entregar dos trabajos gordos que requerían tiempo. "No pasa nada!", se dijo mi yo del pasado, "me planificaré!". Ay, dulce niño del verano, después de 20 años viviendo contigo mismo y todavía no te has dado cuenta de que no eres capaz de planificarte... Bueno, la cuestión es que me vi los tres días antes de entregar los trabajos sin poder escribir ni una palabra. Ni una. 0. Días vacíos. Y tres días vacíos en el Nanowrimo soy muy difíciles de recuperar (5001 palabras para ser exactos). Y aún podréis decir: ¡no pasa nada! Como el resto del mes vas a estar más libre escribes un poco más todos los días y solucionado.

Eso es exactamente lo que pensó mi yo del pasado, obviando un detalle que se le olvidaba: los días 18, 19 y 20 estoy de viaje por Escocia. Y como comprenderéis, lo voy a tener difícil para escribir. O sea que otros tres días vacíos! Tres días con un wordcount de 0 palabras! 5.000 palabras más para recuperar!

Ah, y no olvidemos los días en los que mis amigos decidían hacer viajes y planes guays y claro... pues uno tiene que ir, porque solo se está de Erasmus una vez, y hay que aprovechar. O sea que para colmo, algunos días tampoco llegué a las 1667 palabras diarias. Lo que hace la cifra de palabras para recuperar mucho, mucho más gorda.

Y así es como están las cosas actualmente. 22.000 palabras cuando debería llevar 28.000. Sé que no es para tanto, que es algo que se puede recuperar, y que si no escribí fue principalmente por el Erasmus, que es una cosa que hay que aprovechar... Y no me malinterpretéis, me considero muy afortunado de estar en Inglaterra, y de irme de viaje a Escocia, no es una queja en absoluto (¿alguien en algún universo se quejará por irse a Escocia?). Solo estoy señalando el hecho de que no podré escribir, y que siento que estoy fracasando un poquito con el Nanowrimo de este año.

Aún así, yo me mantengo optimista y pienso que la última semana le puedo dar un empujón a la novela y sacarla adelante con sus 50.000 palabras! Me llevaré el portátil al viaje de Escocia para escribir en los ratos libres (todos sabemos que será en vano, pero por si las moscas...). Y la última semana haré intensivo de biblioteca y café y me recuperaré de los días perdidos.

Y si a pesar de todo fracaso y no logro superar el Nanowrimo... aún así estaría feliz porque habría escrito, al menos, 22.000 palabras. Esto es un reto para escribir, todo lo que se escriba, aunque no se logre superar el reto, está bien. Ayuda, es un avance. Lo que vengo a decir es que no importa si se gana o se pierde, si llegas a ls 50.000 palabras en noviembre o no. Lo importante es escribir y acabar la historia entre manos. ¿Qué más da si la acabas en diciembre? Todo lo que hayas escrito en noviembre estará bien, porque te habrás empujado a ti mismo/a a escribirlo. Y eso ya es algo. Yo ya he escrito más de lo que escribo todos los meses, y eso es algo que hay que celebrar.

Y para celebrarlo, pues me voy a Escocia, hala.